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SUPERDEPORTIVOS ESPAÑOLES (II): ASPID



En el anterior post hablé del curioso concepto que desarrolla Tramontana para ofrecer un exclusivo superdeportivo diferente a lo habitual. Ahora, siguiendo con esta serie de post sobre los deportivos que se producen en España, hablo de Aspid, una marca donde la tecnología es su mayor baza para diferenciarse de la competencia.


IFR Automotive es una compañía fundada en 2003 en Reus (Tarragona), por el madrileño Ignacio Fernández Rodríguez (siglas de IFR),  ingeniero con un extensa experiencia en el mundo del motor desarrollada en SEAT Sport, Prodrive Automotive y en el equipo Mitsubishi del campeonato del mundo de Rallies. Fernández creó una empresa que pudiera asumir un papel de liderazgo en el mercado del automóvil en cuanto a la innovación de las nuevas tecnologías”. En 2008 presentó su primer modelo en el Salón de Londres, el Aspid SuperSport, que comenzó a comercializarse al año siguiente. En la actualidad Aspid pasa de ser nombre del primer modelo a nombre oficial de la marca.


Toma el nombre Aspid de una víbora venenosa que habita en el nordeste de España y que se caracteriza por sus movimientos rápidos. La idea era “crear un deportivo de lujo diseñado para salir a la carretera, conducirlo y disfrutarlo, transportando al conductor a un estado emocional que solo se consigue con los coches de competición, ofreciendo los mayores estándares en tecnología, seguridad y bajas emisiones”. 

Vista lateral Aspid SS

El Aspid SuperSport es un biplaza de diseño retro-futurista, con las ruedas separadas de la carrocería y las puertas y el techo desmontables. Presenta un tamaño reducido de solo 3,75 metros de largo por 1,16 metros de alto y una anchura de 1,87 metros. La distancia entre ejes es de 2,16 metros. El chasis monocasco producido en composite con una tecnología desarrollada en exclusiva por la propia empresa, denominada “Alexcom”, cuenta con un peso de solo 740 kilogramos. Para su construcción, además, se emplean tubos cuadrados realizados en aluminio extruido y en forma de paneles de nido de abeja. De esta forma el chasis es “hasta 10 veces más rígido que uno convencional”.

Aspid SS con las puertas abiertas


En cuanto al motor, equipa un cuatro cilindros con compresor de origen Honda (introducido en el S2000), convenientemente modificado por la empresa, que cúbica 2 litros, rinde 402 CV a 8600 rpm y da 326 Nm de par motor, que se transmiten a las ruedas posteriores mediante un cambio manual de 6 velocidades. Alcanza los 100 km/h en 2,8 segundos y su velocidad máxima está limitada a 250 km/h. El Aspid es capaz de soportar una altísima aceleración lateral de 1,6g. Fernández estaba convencido de que “solo mediante una reducción de peso se podía combinar sostenibilidad con prestaciones deportivas”; Así es como se puede alcanzar unos escasos 5,5 litros a los 100 km de consumo medio.

Frontal del Aspid SS


El sistema de frenado también es una tecnología específica desarrollada en exclusiva por la empresa, denominada “TBD”, que según los responsables de la firma “es hasta un 70% más ligero, pero también más efectivo y duradero, ya que no acumula calor. Consiste en dobles discos perforados por cada rueda, de 320 milímetros en el eje delantero y de 268 milímetros para el eje trasero. El 160 km/h a 0 lo realiza en solo 3,1 segundos. 

Zaga del Aspid SS sin puertas


Detalle del volante con la pantalla interactiva
Dando prioridad a la tecnología y respecto al interior, una pantalla interactiva integrada en el volante y denominada “Unidrivecontrola la mayoría de las funciones, reemplazando todos los botones y palancas de control que normalmente se encuentran en cualquier tipo de vehículo y así el número de cables se reduce en aproximadamente un tercio de lo que necesitan otros coches para la misma funcionalidad, siendo otra de las claves de la reducción de peso. Además integra GPS, Bluetooth, WiFi,... 

Interior del Aspid SS


En la empresa aseguran que, “al igual que la moda de alta costura, se puede personalizar hasta tal punto que el cliente dispondrá de un coche único”. Con una producción de 50 unidades al año se parte de un precio de 95.000 euros, siendo el número de opciones tan elevado que el precio final puede duplicar al de base. Además los responsables han conseguido que el coche cumpla con los requisitos exigidos por la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), lo que significa que es posible pasar de la calle al circuito, y viceversa, sin ningún tipo de intervención en el mismo.

Vista lateral-frontal del Aspid SS


Para finales de 2014 se anuncia un nuevo modelo, el Aspid GT-21 Invictus, Según la marca, “se trata del primer GT open-wheel (ruedas delanteras descubiertas) con configuración 2+2 de la historia”. Equipará un motor delantero central V8 de origen BMW de 4,4 litros de cilindrada con 450 CV a 8300 rpm y un par motor de 440 Nm que se transmitirá a las ruedas traseras mediante dos opciones de caja de cambios: una manual-secuencial de doble embrague de 7 velocidades o una manual de 6. Con unas medidas de 4,44/ 1,9/ 1,22 metros (largo/ancho/alto) y 2,56 de batalla, el ligero chasis se produce en composite con la tecnología “Alexcom” de la casa, rebajando la bascula a 990 kilogramos de peso y lanzando el coche hasta los 305 km/h con un 0 a 100 km/h en 3 segundos. Dispone de la tecnología “TBD para el sistema de frenado con discos de 400 milímetros en ambos ejes. Se fabricará de manera artesanal, uno a uno, con más de 100 opciones distintas para su configuración y, como el anterior SuperSport, cuenta con especificación de la FIA para correr en circuito.  El precio aún no se ha hecho público por la marca.





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Por Manu Ferrón. Con la tecnología de Blogger.